top of page

Crisis en Chile

  • intinews
  • 29 nov 2016
  • 3 Min. de lectura

Chile. Cientos de miles marchan exigiendo el fin de las AFP (Foto: EFE)

Serias divergencias han surgido en las últimas semanas acerca de las tendencias de la economía chilena. La desaceleración del crecimiento es de las pocas cosas en que se coincide.

Si bien las proyecciones del Producto Interno Bruto (PIB) están aún lejos de caer e niveles recesivos (negativos) bien podrían reducirse si no se logra revertir la tendencia de la inversión medida por la Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF).

En efecto, los proyectos mineros están suspendidos esencialmente por la reducción del precio del cobre y no por las expectativas de las reformas, que se han convertido en el único factor de explicación de la oposición ante todo problema económico.

Chile. Decenas de miles de estudiantes marchan por mejoras en Educación (Foto: ABC Color)

Asimismo, las expectativas del Fondo del Infraestructura se han retrasado entre otras cosas porque los procedimientos de las fuentes de tales fondos no están aún en “tierra derecha”. Asimismo, la construcción se ha desacelerado ante las expectativas de mayor prudencia en la población para asumir responsabilidades en tiempos de incertidumbres laborales.

Cabe notar que, pese al notorio incremento del tipo de cambio de alrededor de 20% entre 2011 y 2016, los impactos inflacionarios han sido controlados y no han superado el margen que se ha dado el Banco Central para la inflación. Esta se ha mantenido muy ligeramente por sobre el tope del rango (+4%), lo cual es muy deseable para una sociedad en que las transacciones de mediano y largo plazo se realizan en unidades de fomento, las cuales están indexadas por la inflación.

PUBLICIDAD

De otra parte, las tasas de desocupación se han mantenido estables pese a la reducción del trabajo. Esto incluso ha sorprendido a los especialistas porque, si no tiene impactos en las bajas de productividad, es porque se están creando trabajos de menores ingresos; de tiempo parcial o en tareas intermitentes. Como sea, la precariedad laboral es una constante que debe ser analizada porque refleja el mercado laboral nacional y sus implicancias, especialmente sobre la previsión social.

Miles de manifestantes participan en una marcha por el centro de Santiago de Chile en apoyo a los indígenas y los mapuches (Foto: EFE/Mario Ruiz)

A modo de epílogo, cabe discutir si bastaría con que subiese el precio del cobre para que Chile salga del estancamiento actual o bien es necesario acompañar esta situación a otros factores estructurales que traban el crecimiento con equidad en el país, como: la dependencia de los ingresos –públicos y privados– del metal rojo; el rol subsidiario del Estado que le impide asumir posiciones activas en la economía; el modelo que basa su productividad en competencias espurias (recursos no renovables, bajos pagos compensatorios a los costos ambientales y bajos salarios); los extraordinarios márgenes de ganancia de las empresas al menos oligopólicas; o la desprotección al consumidor, entre otros. Todo lo anterior conduce a que Chile es el país de peor distribución de los ingresos de América Latina, lo cual, por sí solo, retarda el crecimiento.

Es el conflicto laboral más grande que ha tenido que enfrentar el grupo Solari desde que se levantó Homecenter Sodimac, hace 27 años. Son más de 8 mil los empleados que persiguen reajustes salariales relacionados con el crecimiento real de la empresa. (El Mostrador)

Por: Rafael Urriola Magíster en economía pública y planificación

El Mostrador

 
 
 

Comentarios


Síguenos en Facebook
  • © 2014 intinewspe.com

  • INTI News. Todos los derechos reservados.

  • Contacto: intinewsperu@gmail.com

  • V.E.S. - Lima - Perú

  • Web desarrollada por Impresion@

bottom of page